Las 4 partes de un plan de gestión de crisis reputacional

Desafortunadamente, la crisis reputacional es algo a lo que todas las empresas están expuestas en algún momento, especialmente con la relevancia que el entorno digital tiene en la actualidad. Considerando esto y el impacto que ello puede tener en la continuidad de una marca, en la confianza de sus clientes y promotores y en sus propios empleados, tener un buen plan de gestión de crisis reputacional es indispensable para todo negocio.

Importancia de un plan de gestión de crisis reputacional

Todas las personas que llevan adelante un negocio pueden saber la importancia de tener un buen plan de negocios en el que se puedan detallar los pasos a seguir para alcanzar los objetivos comerciales del mismo. No obstante, el plan de gestión de crisis reputacional es algo que suele tener menos atención. La gestión de crisis no es algo que pueda dejarse al azar, sino que requiere de una planificación a fin de reducir el impacto y poder recuperar el camino de crecimiento.

Algo que es importante tener en cuenta es que el plan de gestión de crisis reputacional se debe elaborar antes de que esta se produzca, para poder estar preparados en caso de imprevistos. Además, es esto lo que va a permitir tomar acciones de manera inmediata, reduciendo las consecuencias de la crisis y pudiendo retomar el control de la situación. Por otro lado, es importante tener en cuenta que un plan elaborado detalladamente puede permitir elaborar simulaciones, que ayuden a identificar los resultados que una potencial crisis puede tener en la empresa.

Te recomendamos que revises el artículo “Guía completa de gestión de la reputación digital de tu marca o negocio” y lleves la reputación de tu negocio al siguiente nivel.

Las partes del plan de gestión de crisis reputacional

Ahora que hemos visto la importancia de la formulación de este documento, vamos a contarte las distintas partes que debe contener todo plan de gestión de crisis reputacional.

Primera parte

La primera parte va a componerse por los objetivos. Es la instancia en la que se va a explicar qué es lo que se busca con este plan de gestión y en qué momentos o situaciones es necesario aplicarlo. Además, es la parte que va a determinar a quién está destinado el documento y quiénes son las personas que deben hacerse cargo de las gestiones.

Segunda parte

Una vez planteados los objetivos y las personas destinatarias del plan, es indispensable entender los tipos de desafíos que la empresa puede encontrar. En este sentido, lo que se debe hacer es definir las situaciones de crisis que pueden ser una potencial amenaza para la empresa, describiéndolas de forma general.

Tercera parte

Como sabemos, cuando una crisis tiene lugar, es indispensable actuar de forma veloz para poder reducir al máximo el impacto de esta y sus consecuencias negativas. Por esto, esta parte vamos a destinarla a generar el protocolo de comunicación a seguir en caso de crisis, incluyendo aquí no solamente qué es lo que se debe comunicar y con qué medios o plataformas, sino también quiénes van a ser las personas encargadas de llevar adelante dicha comunicación.

Cuarta parte

Posteriormente a lo anterior, vamos a continuar con el plan de acción. Aquí, además de un plan de comunicación, se va a hacer referencia a las acciones efectivas que se deben desarrollar para poder reducir el impacto de la crisis reputacional y para poder recuperar la buena reputación de la marca. En muchos de estos casos puede ser necesario incluir en esta parte los nombres y tareas de las personas que se van a hacer cargo de cada una de estas acciones.

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