Deepseek, la IA china que desafía a ChatGPT: ¿revolución o imitación?

Si has estado siguiendo el mundo de la inteligencia artificial, seguro que en algún momento te has topado con Deepseek. De repente, este nombre ha empezado a sonar por todas partes, y no es casualidad. Deepseek es un modelo de IA desarrollado en China con un enfoque particular sobre la información y los datos que procesa, lo que hace esencial contar con un servicio de monitoreo de marca en redes sociales para analizar su impacto y posibles riesgos reputacionales.
Pero, ¿qué hay de cierto en todo esto? ¿Es realmente un rival digno o estamos ante otro intento fallido de competir con Occidente? Vamos a desgranarlo sin filtros en este post de 202 Digital Reputation.
Deepseek: el ChatGPT chino que intenta hacerse un hueco
Para entender el revuelo, hay que poner las cosas en contexto. Hasta ahora, la inteligencia artificial generativa estaba dominada por OpenAI, Google DeepMind y Anthropic. China, aunque con avances importantes en IA, no había conseguido lanzar un modelo que realmente compitiera a nivel global.
Y aquí es donde entra Deepseek. Este modelo ha llegado con la etiqueta de "la alternativa china a ChatGPT", con un enfoque más alineado con las necesidades (y restricciones) del mercado asiático. El problema es que, más allá del hype, hay muchas dudas sobre si realmente está a la altura.
¿Un competidor real o solo otra estrategia de marketing?
Desde el primer momento, Deepseek se ha vendido como el gran rival de ChatGPT, pero la realidad es que las primeras pruebas no están dejando a todo el mundo convencido.
- Los que lo defienden dicen que es un paso clave para que China no dependa tanto de la tecnología de EE.UU. y que, con el tiempo, podría alcanzar a OpenAI.
- Los que lo critican lo ven como un modelo aún limitado, con menos precisión, menos fluidez y, sobre todo, sujeto a los controles y restricciones del gobierno chino.
La llegada de Deepseek: ¿por qué ahora y no antes?
Si Deepseek ha aparecido en escena ahora y no hace unos años, no es por casualidad. China lleva tiempo queriendo meterse de lleno en la carrera de la inteligencia artificial, pero hasta ahora no había conseguido lanzar un modelo que realmente pudiera competir con ChatGPT o Gemini (el de Google).
Entonces, ¿qué ha cambiado? Pues básicamente, tres cosas: una competencia cada vez más feroz, restricciones tecnológicas que han forzado a China a espabilar y un empujón enorme por parte del gobierno chino. Vamos a desglosarlo bien.
La inteligencia artificial está avanzando a toda velocidad
Desde que OpenAI lanzó ChatGPT, la inteligencia artificial se ha convertido en EL tema del momento. Empresas como Microsoft, Google y Anthropic están invirtiendo miles de millones en el desarrollo de modelos más potentes, más rápidos y más inteligentes. Las empresas y personas que interactúan con este tipo de tecnologías pueden necesitar servicios de regulación digital, como la eliminación de contenido obsoleto de Google o la eliminación de datos mercantiles, para proteger su reputación ante posibles impactos negativos generados por la IA.
China, por supuesto, no quiere quedarse atrás. Deepseek nace como una respuesta a esta nueva era de la IA, en la que los modelos de lenguaje están cambiando la forma en que trabajamos, buscamos información e incluso nos comunicamos.
Pero hay algo que ha obligado a China a acelerar las cosas.
Estados Unidos le ha cerrado el grifo a China
Uno de los mayores problemas que tiene China en esta carrera es el acceso a hardware de última generación. Y aquí es donde entra en juego la política.
Desde 2022, Estados Unidos ha impuesto restricciones a la exportación de chips avanzados (como los de Nvidia y AMD) a China, lo que ha complicado bastante las cosas para entrenar modelos de IA a gran escala. Sin estos chips, el desarrollo de inteligencia artificial se vuelve más lento y caro.
¿La solución? Fabricar sus propios chips y desarrollar su propia tecnología. Y en ese contexto nace Deepseek, como parte de la estrategia de China para reducir su dependencia de Occidente en el sector tecnológico.
Básicamente, han llegado a la conclusión de que, si no pueden comprar la mejor tecnología, van a construir la suya.
Un modelo de IA hecho a medida para China
Otro punto clave es que Deepseek no es solo un modelo de IA, es una IA diseñada para China. A diferencia de ChatGPT, que (con sus limitaciones) tiene un enfoque global, Deepseek está creado para adaptarse a las normas y valores del gobierno chino.
Esto significa varias cosas:
- El modelo debe respetar las regulaciones de censura del país, por lo que ciertas respuestas estarán controladas o directamente restringidas.
- Su entrenamiento está alineado con la visión de Pekín, lo que puede afectar a la forma en que maneja información sobre política, historia o eventos actuales.
- Es una IA que quiere fortalecer el ecosistema digital chino, ofreciendo una alternativa nacional a las herramientas de OpenAI o Google.
¿Qué es Deepseek? Lo que promete y lo que realmente ofrece
Vale, ya sabemos que Deepseek es el nuevo modelo de inteligencia artificial de China y que llega con la intención de competir con ChatGPT. Pero, ¿qué tiene de especial? ¿Es una revolución o simplemente más de lo mismo con otro nombre?
La teoría dice que Deepseek es un modelo de lenguaje avanzado, capaz de generar texto, responder preguntas y realizar tareas como la redacción de contenido o la asistencia virtual. Hasta aquí, nada que no hayamos visto antes. La diferencia está en cómo ha sido desarrollado, con qué datos ha sido entrenado y, sobre todo, hasta dónde puede llegar en comparación con sus rivales.
Desde 202 Digital Reputation, vamos a analizarlo sin rodeos.
Un modelo potente, pero con barreras evidentes
Deepseek, como otros modelos de IA, se basa en redes neuronales y aprendizaje profundo, lo que le permite generar respuestas de manera autónoma. Según sus creadores, tiene una estructura similar a GPT-4, con miles de millones de parámetros, lo que significa que debería ser capaz de ofrecer respuestas bastante afinadas.
El problema es que no todo es cuestión de potencia bruta. Aquí es donde entran los matices:
- En chino, lo hace bien: no sorprende que su rendimiento en mandarín sea bastante bueno. Está optimizado para su idioma nativo y parece entender bien el contexto.
- En inglés, baja el nivel: aunque puede desenvolverse en inglés, su fluidez y precisión no están al nivel de ChatGPT. Se nota que la calidad de los datos en este idioma no es la mejor.
- Menos creatividad, más rigidez: Deepseek parece estar diseñado para ser más preciso en respuestas técnicas, pero menos flexible y creativo en comparación con ChatGPT. Vamos, que si esperas respuestas con chispa o imaginación, te puedes llevar una decepción.
- Censura y temas sensibles: un muro infranqueable: si le preguntas sobre temas políticos, derechos humanos o cualquier asunto que no encaje con la narrativa oficial de China, obtendrás respuestas vagas o, directamente, un bloqueo total.
Deepseek puede generar y modificar narrativas en internet, proteger la identidad digital de marcas y personalidades es más importante que nunca. Para ello, los servicios de creación de presencia digital y blindaje de marca pueden ser clave para mantener una imagen sólida y confiable en el entorno online.
¿De dónde saca la información Deepseek?
Aquí es donde la cosa se pone interesante. Para que una IA funcione bien, necesita ser entrenada con millones de textos y datos variados. El problema es que China tiene un acceso limitado a muchas fuentes de información globales, lo que afecta directamente a la calidad del entrenamiento de Deepseek.
Algunos puntos clave sobre su entrenamiento:
- Acceso restringido a información internacional: Deepseek no ha podido ser entrenado con muchas de las fuentes que sí han usado modelos como ChatGPT o Gemini, lo que limita su conocimiento sobre ciertos temas.
- Control gubernamental: en China, internet está fuertemente regulado, lo que significa que Deepseek no solo tiene filtros en lo que dice, sino también en lo que ha aprendido.
- Privacidad y datos de los usuarios: aunque no hay evidencia de que Deepseek almacene información personal de los usuarios, sí se sabe que opera dentro de un ecosistema tecnológico en el que el gobierno chino tiene mucho más control que en Occidente.
¿Es Deepseek una alternativa real a ChatGPT?
Aquí viene la pregunta del millón. ¿Merece la pena Deepseek o es solo otro intento de China por decir "nosotros también tenemos IA"?
La respuesta depende de para qué lo necesites:
- Si vives en China y necesitas una IA adaptada a ese entorno, Deepseek puede ser una opción interesante.
- Si buscas un modelo avanzado, flexible y sin restricciones, ChatGPT sigue siendo la mejor opción con bastante diferencia.
Deepseek vs. ChatGPT: ¿China le puede plantar cara a OpenAI?
Desde que Deepseek apareció en escena, la comparación con ChatGPT ha sido inevitable. Al fin y al cabo, OpenAI ha puesto el listón muy alto en inteligencia artificial, y cualquier nuevo modelo que quiera destacar tiene que medirse con él.
La gran pregunta es: ¿estamos ante un verdadero rival o simplemente ante una versión más limitada y controlada?
1. ¿Quién responde mejor? Precisión y coherencia
Cuando usas una IA, lo que más te importa es que te dé respuestas claras, precisas y útiles. Y aquí es donde ChatGPT sigue teniendo una ventaja bastante evidente.
- Deepseek es bueno en chino: está optimizado para este idioma y entiende bien el contexto cultural. Pero cuando se le hacen preguntas más abiertas o complejas, las respuestas pueden ser demasiado genéricas o rígidas.
- En inglés, la diferencia se nota mucho más: mientras que ChatGPT (especialmente en su versión GPT-4) responde con más fluidez y naturalidad, Deepseek a veces suena mecánico y menos preciso.
- En temas técnicos, Deepseek cumple: si le pides que te ayude con código o conceptos científicos, responde bien. Pero en general, sus respuestas no son tan profundas ni detalladas como las de ChatGPT.
Si lo que buscas es una IA que te dé respuestas claras y completas, ChatGPT sigue ganando sin mucha discusión.
2. ¿Quién es más imparcial? Sesgos y censura
Aquí es donde las diferencias entre ambos modelos son más que evidentes. Deepseek ha sido desarrollado en China y opera bajo sus normas, lo que significa que sus respuestas están sujetas a controles y restricciones.
- No toca temas delicados: si le preguntas sobre política, derechos humanos o cualquier tema controvertido, probablemente te esquive la pregunta o te dé una respuesta muy neutral.
- Su visión del mundo es más limitada: ChatGPT tiene acceso a información más amplia, lo que le permite dar respuestas más equilibradas. Deepseek, en cambio, se mueve dentro de las líneas marcadas por el gobierno chino.
- Menos flexibilidad en temas sociales: incluso en cuestiones más generales, Deepseek tiende a ser más conservador y menos abierto a opiniones diversas.
Si buscas una IA con menos restricciones y más acceso a información global, ChatGPT es claramente la mejor opción.
3. ¿Para qué sirve cada uno? Casos de uso
A la hora de elegir entre Deepseek y ChatGPT, lo más importante es saber para qué lo necesitas.
- Si hablas chino y necesitas una IA optimizada para ese idioma, Deepseek puede ser una opción interesante.
- Si buscas respuestas en inglés (o en otros idiomas), ChatGPT sigue estando muy por encima.
- Para creatividad (escribir, generar ideas, contar historias, etc.), ChatGPT gana por goleada. Deepseek es más rígido y le cuesta más improvisar.
- Si necesitas información técnica o científica, ambos pueden servir, pero ChatGPT sigue dando respuestas más precisas y profundas.
- Si quieres información sin filtros o sin censura, ChatGPT es, sin duda, la opción más libre.
Entonces, ¿Deepseek puede superar a ChatGPT?
A día de hoy, ni de broma. Deepseek es un avance importante para China, pero todavía está muy lejos de competir de tú a tú con OpenAI.
Conclusión
Después de analizar a fondo Deepseek, su tecnología y el contexto en el que ha nacido, hay algo que está bastante claro: no es el gran rival de ChatGPT… al menos por ahora.
China lleva tiempo queriendo tener su propia inteligencia artificial para no depender de Occidente, y Deepseek es un paso en esa dirección. Pero si lo comparamos con los gigantes del sector, todavía le queda mucho camino por recorrer.
Si lo vemos como una IA hecha a medida para el mercado chino, tiene sentido. Pero si lo comparamos con ChatGPT en términos globales, la diferencia es notable.
Deepseek no es un fracaso, pero tampoco es una revolución. Es un paso más en la estrategia de China para desarrollar su propia inteligencia artificial, aunque sigue lejos de ser un competidor real a nivel global.De momento, ChatGPT sigue dominando el juego, pero con China metiendo cada vez más dinero en IA, habrá que ver qué nos depara el futuro. Quizás en unos años estemos hablando de un Deepseek mucho más potente, o quizás quede como un experimento más dentro del ecosistema digital chino. El tiempo lo dirá.